Si eres amante de la pizza, seguramente has escuchado hablar del calzone. Esta deliciosa variante de la pizza se caracteriza por su forma cerrada, similar a un empanada o una empanadilla. En este artículo, te enseñaremos cómo hacer una calzone casera, desde la preparación de la masa hasta el relleno y el horneado. ¡Prepárate para disfrutar de una experiencia culinaria única!
¿Son la masa del calzone y la de la pizza iguales?
Una de las primeras preguntas que surgen al hablar de calzone es si la masa utilizada es la misma que la de la pizza. Aunque comparten algunos ingredientes básicos, como harina, agua, levadura y sal, la masa del calzone suele llevar un poco más de aceite de oliva para darle una textura más suave y elástica. Además, la masa del calzone se amasa de manera diferente, ya que se busca obtener una consistencia más elástica y fácil de manejar al momento de cerrar el relleno.
La masa del calzone se prepara de manera similar a la masa de la pizza, mezclando los ingredientes secos en un recipiente y agregando gradualmente el agua y el aceite de oliva. Luego, se amasa durante unos minutos hasta obtener una masa suave y elástica. La masa se deja reposar durante aproximadamente una hora, cubierta con un paño húmedo, para que fermente y adquiera su sabor característico.
¿Cuáles son los ingredientes de un calzone?
El relleno de un calzone puede variar según tus preferencias personales, pero los ingredientes más comunes incluyen queso mozzarella, jamón, champiñones, salami y aceitunas. También puedes agregar ingredientes adicionales como pimientos, cebollas, tomates y albahaca para darle aún más sabor. La clave es utilizar ingredientes frescos y de alta calidad para obtener un calzone delicioso.
Una vez que hayas preparado la masa del calzone, la divides en porciones individuales y las estiras en forma de círculos o rectángulos, dependiendo de tu preferencia. Luego, colocas el relleno en un lado de la masa, dejando un borde libre alrededor. Doblas la masa sobre sí misma y sellas los bordes presionándolos con los dedos o utilizando un tenedor. Esto asegurará que el relleno se mantenga en su lugar durante el horneado.
¿Los calzones llevan salsa de pizza en su interior?
A diferencia de las pizzas tradicionales, los calzones no llevan salsa de pizza en su interior. La salsa de tomate se sirve por separado, generalmente en un recipiente pequeño, para que puedas agregarla a tu gusto. Esto permite que el relleno del calzone no se humedezca demasiado y conserve su textura y sabor característicos. Sin embargo, si prefieres tener la salsa de tomate dentro del calzone, también puedes hacerlo. La clave es encontrar el equilibrio adecuado para que el calzone no quede demasiado húmedo.
Una vez que hayas rellenado y cerrado los calzones, los colocas en una bandeja para hornear previamente engrasada o cubierta con papel de horno. Puedes pincelar la superficie de los calzones con un poco de aceite de oliva para obtener un acabado dorado y crujiente. Luego, los horneas a temperatura alta durante aproximadamente 15-20 minutos, o hasta que estén dorados y el queso se haya derretido por completo.
¿Puedes convertir una pizza en un calzone?
Si alguna vez te has preguntado si puedes convertir una pizza en un calzone, la respuesta es sí. El proceso es bastante sencillo: simplemente doblas la pizza por la mitad y sellas los bordes para crear una especie de empanada gigante. Esto es especialmente útil si tienes una pizza sobrante y quieres darle un nuevo giro. Sin embargo, debes tener en cuenta que la textura y el sabor pueden ser ligeramente diferentes a los de un calzone tradicional, ya que la masa de la pizza puede ser más delgada y crujiente.
El calzone es una deliciosa variante de la pizza que se caracteriza por su forma cerrada y su relleno abundante. Aunque comparte algunos ingredientes básicos con la pizza, la masa del calzone suele llevar un poco más de aceite de oliva y se amasa de manera diferente. El relleno puede variar según tus preferencias personales, pero los ingredientes más comunes incluyen queso mozzarella, jamón, champiñones y salami. Los calzones no llevan salsa de pizza en su interior, pero se sirve por separado para que puedas agregarla a tu gusto. ¡Anímate a preparar tu propio calzone casero y disfruta de su sabor único!